Certezas...

A veces las certezas te caen de golpe dejándote sin aliento...
Las ilusiones se rompen como lo que son: falsos intentos de creer, frágiles y absurdas burbujas de la nada. No sirve rezar! Dejas creer en milagros que nunca han de realizarse. Y te quedas así, sin palabras, sin orden en las ideas; con la cabeza dando vueltas buscando posibles soluciones, sabes que la magia es sólo tu juego para no dejarte caer, pero te caes, bien abajo, de súbito y por dentro. Sólo puedes llorar, sólo puedes tragar amarga saliva y cargar sobre tus hombros el peso de la verdad. Todo esta escrito ya...
¿Para qué reír? ¿para qué fingir? Si al final de cuentas aquello a lo que te aferrabas con vehemencia ha fallado, y te quedas vacío, sin luz y sin dios. Con 3000 demonios cabalgando fuertemente, orillándote al precipicio... Vas a caer, sabes bien que vas a caer, porque tus frágiles alas no resisten más tus absurdos ímpetus de volar. ¿Volar? ¿A dónde? Tus palacios lejanos, tus duendes y princesas te han dado la espalda ¡Despierta! No van a venir a salvarte! No existen, nunca existieron... Fué tu tonta ingenuidad que te hizo creer... Creer en imposibles, en oraciones levantadas al viento, en donde nadie escucha porque no hay nadie que pueda salvarte.
Te sorprendes solo, te reconoces sola, sola... Con un nudo en la garganta preguntando ¿por qué? ¿por qué? Porque si, niña tonta! porque si! Porque la vida es un cruel desengaño que te olbiga a matar aspiraciones, sueños y fantasías, dejándote sólo fantasmas de la certeza impredecible... Si, certezas de nada, de sueños rotos, páginas amarillas de historias que ya nunca podrás contar, anhelos de cuna sepultados a razón de perder batallas. Brazos que no sirven de refugio, brazos que no arrullarán jamás... Piernas que deben seguir andando hacia ninguna parte. Motivos, motores, estrellas, desdibujados en los pasillos blancos, por los seres de batas blancas. No quieres llorar, pero necesitas llorar, porque a partir de hoy enjugarás muchas lágrimas y deberás ser fuerte porque el destino ya te ha marcado... Despídete de tus alas y empieza a caminar. El camino es largo y penoso...
Certezas, si, certezas...
Lu*
"En la salud y en la enfermedad, hasta que la muerte nos separe"...
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